Hoy vamos a hablar sobre qué debemos tener en cuenta a la hora de escoger unas buenas ruedas. Su importancia y función dentro del conjunto de la bicicleta las convierten en uno de sus elementos más importantes.
Tienen muchas funciones y la diferencia entre unas buenas y unas malas ruedas es enorme. ¿Qué función cumplen las ruedas? ¿Pueden unas ruedas ser buenas en todos los terrenos? ¿Merece la pena invertir en ellas?
Funciones de las ruedas en ciclismo
La ruedas cumplen varias funciones clave:
- Seguridad: las ruedas juegan un papel esencial a nivel de seguridad y comodidad. Debe ser capaces de soportar nuestro peso sin deformarse.
- Rigidez: se refiere a la capacidad de transmitir toda la energía aplicada en la pedalada. Una rueda poco rígida será flexible y perderemos parte de la energía, obteniendo peores prestaciones.
- Aerodinámica: las ruedas, junto con el cuadro, son el elemento aerodinámico más importante de la bicicleta. Dirigen el flujo de aire en la mitad inferior de la bicicleta. Especialmente importante es el papel de la rueda delantera, ya que es el primer elemento de la bici que choca contra el aire. Una rueda es más aerodinámica mientras tenga más perfil, menos radios y radios planos.
- Peso: por lo general comprendido entre 1.000 y 2.000 gramos el par sin cubiertas. Las ruedas son el componente más importante de la bici a la hora de aligerar peso, ya que son elementos móviles. Aligerar 400gr. cambiando de cuadro se nota menos que aligerar 400gr. cambiando de ruedas, porque nuestra fuerza pedaleando se transmite directamente a las ruedas, y de ahí al resto de la bici. La transmisión de fuerza pedalada-ruedas es más directa que pedalada-cuadro.
Por leyes físicas que vamos no vamos a explicar en profundidad, el peso es especialmente importante en aquellas partes externas de la rueda (cubiertas, cámara y llantas).
Si quieres aligerar peso, céntrate en estos componentes antes que en los radios o los bujes. Una rueda ligera es muy útil en aceleraciones a poca velocidad (MTB, cambios de ritmo en puertos, etc.)
- Manejo: a menos peso, más manejable será una rueda. Nuestra bici será mucho más reactiva.
- Inercia: en este sentido entran en juego dos aspectos: la calidad de los rodamientos (bujes) y el peso de la rueda. Una rueda pesada ofrece una gran inercia a altas velocidades. El propio peso de la rueda contribuye a mantener la velocidad. Eso sí, como hemos explicado en el « peso », una rueda pesada cuesta más acelerarla para llegar a esa velocidad alta que nos permita disfrutar de una gran inercia.
- Estética: personalmente, y la opinión pública también, encuentro las ruedas con perfil alto mucho más bonitas estéticamente. Una bicicleta cambia su apariencia por completo entre un perfil de ruedas alto y uno bajo.
Las ruedas perfectas de bicicleta, ¿existen?
Podríamos afirmar que la rueda perfecta es aquella que posee el máximo de prestaciones de todas las funciones anteriores. ¿Es posible que exista una rueda perfecta para todo tipo de condiciones? La respuesta es NO.
Es imposible porque algunas de estas funciones son incompatibles entre sí. Por ejemplo, comparando dos ruedas hechas del mismo material, una rueda de perfil alto pesará más que otra de perfil bajo porque contiene más material (más cantidad). Esto demuestra que, ante igualdad de calidad del material, aerodinámica y peso son opuestos.
Aclaración: podemos encontrar ruedas tope de gama de perfil alto que pesen menos que otras ruedas de baja gama de perfil pequeño. La razón es que la alta calidad del material de la rueda de perfil compensa el hecho de que la rueda contenga más cantidad de material.
Lo que sí existe es la rueda perfecta para una circunstancia concreta. Toda buena rueda debe soportar nuestro peso y ser rígida para transmitir bien la energía. A partir de ahí sus otras virtudes dependerán de la circunstancia:
- Ciclismo de carretera en llano: aerodinámica. La rueda debe tener perfil (40 a 60mm), aunque eso comprometa un poco el peso. Tener un peso medio beneficiará la inercia, sin llegar a ser un lastre en posible arrancadas. Aquí encontrarás un vídeo explicativo más completo.
- Ciclismo de carretera en subida: peso y manejabilidad. La rueda debe ser manejable y de poco peso para subir mejor. Comprometer la aerodinámica y la inercia no es tan importante etapas de montaña con velocidades medias más bajas.
- Ciclismo de carretera en contrarreloj: aerodinámicas e inercia. Ruedas muy aerodinámicas (60 u 80mm delante, más de 80mm detrás) que aportan una gran inercia. Esto perjudica el peso y la manejabilidad en días de viento. Si las condiciones climatológicas son muy adversas podemos optar por menos perfil aerodinámico afin de ganar maniobrabilidad.
- MTB: peso y rigidez. Parecido al ciclismo de carretera ensubida. En MTB las velocidades medias no son altas y a menudo hace falta mucha fuerza. Por ello lo ideal son ruedas de poco peso, alta manejabilidad y una gran rigidez que transfiera bien la fuerza que ejercemos.
¿Merece la pena cambiar las ruedas de la bicicleta?
Por mi experiencia personal puedo deciros que sí interesa invertir en unas ruedas. He podido probar unas ruedas malas (100€ aprox.) y posteriormente unas de nivel medio (400€ aprox.). En ambos casos de trataba de ruedas de perfil bajo. El cambio ha sido muy notable, a mejor evidentemente.
Podemos encontrar buenas relaciones calidad-precio por unos 350€ en ruedas de perfil bajo, y por unos 500€ en caso de ruedas de perfil. Aunque haya pares mucho más caros y sofisticados, estos precios rondan lo que yo me compraría como aficionado que sale en bici varias veces por semana. La inversión no es pequeña, pero creo que serían los 350-500€ de material mejor invertidos en la bicicleta.
