En esta entrada voy a tratar el tema de cómo colocar y ajustar correctamente el sillín de la bicicleta. Antes de empezar a analizar distintos aspectos quiero hacerte una recomendación.
Si vienes sufriendo dolores o molestias en diferentes zonas del cuerpo y crees que tienen su origen en la posición sobre la bicicleta, sin dudarlo, acude a un biomecánico.
Es evidente que únicamente para el ajuste del sillín no es necesario pero como este factor no es el único que influye en una correcta posición sobre la bici, ¡te lanzo el consejo!
¿Qué puede pasar si llevas mal ajustado el sillín?
Lo primero que puede originar es una lesión o molestia continua en las piernas (rodillas, cuádriceps, etc.) o espalda (zona lumbar). Se puede pasar de disfrutar una ruta en bici a aborrecerla literalmente por el mal ajuste.
Además, trae consigo una falta de rendimiento importante. Las pedaladas pierden eficiencia y el esfuerzo a realizar para un mismo tramo aumenta de una manera considerable.
Posición perfecta del sillín de la bicicleta
Cuando se trata la posición ideal del sillín se miran principalmente dos aspectos: ajuste vertical (altura del sillín) y longitudinal (avance e inclinación del sillín).
Ajuste vertical o altura del sillín:
Según estudios biomecánicos hay una medida estándar para determinar la altura correcta del sillín. Esta es el 88% de la medida de la entrepierna (sin pensar mal).
Es decir: medida de entrepierna x 0,88 = altura del sillín. Para tomar la medida de la entrepierna hay un truco muy sencillo. Colócate de espaldas a la pared, descalzo, con las piernas juntas y con un libro o regla en la entrepierna.
Mides desde el punto más alto del objeto al suelo y esa es la medida de la entrepierna. La altura del sillín se calculará desde el centro del eje pedalier al centro del sillín siguiendo el tubo del cuadro y la tija.Otra opción para calcular esa altura es sentarse en la bici y extender la pierna poniendo el pedal en la posición más baja y apoyando el talón. La pierna deberá quedar extendida con una leve flexión.
En caso de que no llegue a apoyar el talón en el pedal, habrá que bajar el sillín y si la rodilla flexa en exceso y no está extendida la pierna, habrá que subirlo. Para hacer esta prueba hay que mantener la cadera en una posición horizontal en todo momento, sin inclinar hacía un lado.
Ajuste longitudinal del sillín
Ajuste longitudinal del sillín: Para comenzar, el sillín siempre tiene que estar en posición horizontal, paralelo al suelo. Esto se puede comprobar y corregir con un nivel.
Y para saber si el avance o posición longitudinal del sillín es el correcto hay que hacer lo siguiente: Subido en la bici (con ayuda de alguien o un rodillo) se colocan los pedales a la misma altura y la rotula de la pierna que está más avanzada debe de quedar en el extremo de la biela. Para comprobar esto se puede colgar una cuerda con algún peso desde la rotula y ver dónde queda con respecto al extremo de la biela.
Si queda por delante habría que adelantar el sillín y si queda por detrás, la solución es atrasarlo. Es muy importante tener en cuenta que uno de los ajustes puede modificar el otro y viceversa. Para ello habrá que hacer más de una comprobación de medidas.
En los sillines en los que su forma no sea recta y la parte trasera se incline hacía arriba, hay que obviar esa zona para mirar con el nivel su posición.
Indicadores de que el sillín está mal ajustado
- Cuando vas sentado en el sillín y corriges continuamente la postura echando el cuerpo hacía la parte trasera del asiento. Esto es síntoma de que el sillín está más bajo de lo que debería de estar ya que al echar el cuerpo hacía atrás, se busca aumentar la distancia con respecto a los pedales.
- Si buscas una postura más adelantada (en zonas de pedaleo normal que no sean duras ascensiones) significa que llevas el sillín más alto de lo que necesitas. Lo que busca tu cuerpo es reducir la distancia con respecto a los pedales y por eso tira hacía delante.
Tus rodillas también “hablan”
Un dolor o molestia en la rodilla no siempre viene originado por el ajuste del sillín pero puede ser un indicativo de que la posición no es correcta. Normalmente, si las molestias son en la parte anterior de la rodilla significa que el sillín va más bajo de lo aconsejable. En cambio, si la molestia o el dolor es en la parte posterior de la rodilla es un síntoma de que la altura del sillín es demasiado elevada.
